lunes, 7 de febrero de 2011

Relatos cortos volumen 10: Algún día tú te acordarás de mi

Apenas si habían pasado un par de semanas... todo habia ido demasiado deprisa y Crístina estaba recuperándose. Sentada en mitad del salón vacío, contemplaba las paredes ahora desnudas de cuadros y estanterias. No podía creerlo, todo iba bien no? Entonces por que...?

Las llaves tintineando en la puerta la distrajeron de sus pensamientos, se levantó del suelo donde había pasado cuanto?, la ultima media hora?, o eran 2 ó 3 horas? Se le había pasado el tiempo volando, la verdad no sabía cuanto tiempo habia pasado alli sentada. Se miró la ropa... cuanto hacía de la última vez que se habia duchado? Ella juraria que había sido esa misma mañana sin embargo... no podia recordarlo.

La puerta se abrió lentamente y Marcos entró a la casa vacía sin tan siquiera pararse a averiguar si ella estaba en casa.

Como te atreves?-le preguntó Cristina enfureciendose de pronto al ver que su ex entraba en la que habia sido su casa como si tal cosa

Marcos la ignoró y se fue directo al dormitorio que habían compartido durante tantos años. Abrió una de las ventanas y contempló el paisaje que desde alli se veía mientras ella le soltaba toda clase de improperios. Tras un rato, se sentó en el alfeizar de la ventana dándole la espalda a Cristina que le habia seguido hasta alli completamente enfurecida por su descaro.

Sabes?-Comenzó él ignorando todas aquellas palabras malsonantes que Cristina le estaba otorgando-Tenías razón...-Cristina se calló de pronto, eso no era propio de su ex- me equivoqué al querer acabar contigo... lo que teníamos era hermoso y fui un imbecil por no verlo antes...-Marcos suspiró mientras Cristina le escuchaba completamente inmovil y en silencio sin poder creer lo que estaba oyendo.

Quien eres tu y que has hecho con el capullo de mi ex?
-le soltó Cristina sin poder contenerse. Estaba segura que intentaba volver a hacerla daño de alguna manera, cómo si tras decirle de un día para otro que no la queria, que se llevaba practicamente todo lo que había en el piso y que se iba a vivir con otra mujer no le hubiera hecho suficiente daño. Marcos siguió hablando como si no la hubiera escuchado.

Te echo de menos Cris... echo de menos el llegar a casa y encontrarte bailando en la cocina mientras preparabas la cena, tu risa contagiosa, tus gritos al ver una pelicula de terror, la forma en que me clavabas las uñas en el brazo, el hoyuelo que se te formaba mientras dormias, la forma en que me mirabas como si no hubiera nadie más para ti en el mundo...
-Marcos hizo una pequeña pausa, a Cristina le pareció que se estaba enjuagando las lágrimas, las mismas que ella estaba conteniendo-Tenías razón... algún día me acordaría de ti... lo que no sabía es que te echaría tanto de menos y que doleria de esta forma.

Marcos se levantó con un suspiro y volvió a cerrar la ventana dejándolo todo como estaba antes de su llegada. Cristina se quedó muy quieta tratando que sus palabras no la hirieran como sabía que la estaban hiriendo.

Ya no hay remedio cierto? La cagué y ahora no hay vuelta atrás...

Si,-le interrumpió Cristina-siempre podemos volver...
 

No, el pasado es imposible de enmendar...-susurró Marcos cogiendo una pequeña foto de ambos enmarcada que Cristina tenía en la mesilla de noche y la miró con cariño-Te quiero Cris, siempre te he querido y siempre te querré...

Marcos salió de la habitación antes de darle tiempo a Cristina a reaccionar. Cuando consiguió salir del estupor en el cual las palabras de Marcos la habian dejado sumida salió corriendo tras él pero ya se había ido.

Inquieta y sin saber muy bien que pensar de todo lo que acababa de suceder, se fue a la cocina a prepararse un té para relajar los nervios. Una vez listo se sentó en la enorme meda de la cocina y comenzó a hojear el periódico sin mucho entusiasmo.

Crash!!! El sonido de a porcelana rompiendose contra el piso se escuchó en toda la casa. Cristina se llevó las manos a la boca tratando de reprimir un grito que amenazaba con salir de sus labios si lo dejaba.

Allí junto a una gran mancha de té estaba su foto, a pie de la misma rezaba: "Algún día te acordarás de mi... Padres, hermanos y amigos ruegan una oración por su alma, descansa en paz Cristina"

1 habitantes han dejado su opinión:

Only me! dijo...

Snif, snif!! TT.TT
me recuerda un montón a un libro que tengo, pero esto es más bonito y triste ma.
Te quiero.

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